MEMORIAS DE MARCELO USABIAGA. EN DOS VOLÚMENES.
VOLUMEN I. La joven guardia cuenta la vida de un hombre de aquella generación que accedió al compromiso político y social en las vísperas republicanas y ya no lo dejó nunca. La obra arranca en un tren, en el que el protagonista, un joven irunés de 17 años, conduce a un grupo de fugitivos tras la derrota de la Revolución de Asturias de 1934. Como estudiante en la capital, San Sebastián, es un eslabón en la cadena solidaria que los comunistas iruneses han tendido a los que escapan de Asturias. Intenta pasarlos a Francia, y eso le cuesta su primera cárcel. Atraviesa después toda la vida de la II República, el tiempo de forja de los sueños; sigue en la Guerra Civil, en la que se entrega a muerte; continúa con el maquis, la guerrilla con la que nuestro personaje vuelve a España para seguir combatiendo con las armas a Franco; y acaba tras más de veintiún años de encierro en las prisiones franquistas. La obra constituye el espejo de una vida concreta, pero también la de muchos hombres y mujeres que entregaron lo mejor de sí sin pedir nunca nada a cambio. Para el protagonista, Marcelo Usabiaga, valdría aquello que tantas veces oímos respecto a las vidas plenamente vividas, las vidas muy ricas, aquello de: “su vida es una novela”. Esa novela es la que se ha escrito, intentando que no se perdiera en el relato ni un ápice de su permanente acción, movimiento, riesgo, entrega. Tantas peripecias, vicisitudes, aventuras, situaciones límite, como las de un héroe imaginario; y además reales, incardinadas en la moderna Historia de nuestro país, explicándola. (Incluye extenso archivo fotográfico.)
VOLUMEN II. El hombre de la grúa es la segunda parte de otra obra: La joven guardia, y juntas recogen la vida, intensa, llena de vicisitudes, peripecias, de un combatiente republicano, Marcelo Usabiaga; todas ellas nacidas de su compromiso, de su lucha permanente por la libertad y los avances sociales. La joven guardia era una obra que narraba la vida del héroe, llena de aventuras, en plena efervescencia de la lucha; en ella, aún cuando diera con sus huesos en la cárcel, los sueños, sus sueños de victoria, están intactos. Si decíamos que El hombre de la grúa era la segunda parte, se podría decir también que es su segunda vida. Aquí el tono, la forma narrativa es muy distinta, es intimista, escrita desde las reflexiones del “yo” de Marcelo. Si allí era la vida intrépida del héroe, aquí es la de un hombre que, salido de la cárcel, donde ha pasado más de 21 años, va a incorporarse a la vida en libertad, a reinsertarse en el mundo laboral, todo ello en pleno franquismo, en el más sórdido y gris franquismo de los años sesenta, al que él había combatido hasta la extenuación. La obra transcurre en el recorrido entre su casa y la fábrica donde trabaja Marcelo. En ese trayecto se suceden sus reflexiones, sobre esta libertad podrida en la que habita, sobre la atmósfera de espías y policías del régimen que le atosigan y no le dejan en paz, sobre la nostalgia y el recuerdo de sus camaradas y los sueños derrotados, que son para él un bálsamo, y lo que le mantiene en pie.
MIGUEL USABIAGA (San Sebastián). Es el autor ganador del VII Premio Ciudad Ducal de Loeches por la novela El sueño de Nicolás Colberg. Ha publicado además en Ediciones Irreverentes los títulos: Marcelo: el hombre imposible, sobre las experiencias de su padre en las cárceles franquistas, El Alcalde de Floridsdorf y Muerte en el Aubisque. En la actualidad presenta El hombre de la grúa, continuando con su trabajo de recuperación de las historias de los luchadores republicanos. Anteriormente vieron la luz sus libros: Flores de la República, El Caso Martana, un conjunto de relatos editados por el Foro de la Memoria Histórica, y La joven guardia.
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